La NASA no suele salir mucho a explicar nubes porque su área de trabajo normalmente está por encima de ellas. Sin embargo, no todos los días aparecen en el cielo agujeros perfectamente circulares en las nubes, como si un platillo volante hubiera pasado por allí. Los agujeros en cuestión aparecieron el pasado 30 de enero sobre el Golfo de México, donde algunos espectadores privilegiados como este pescador deportivo pudieron grabarlas en todo su esplendor. Los agujeros en cuestión se llaman Cavum, y aunque son raros, se conocen desde la década...