Tras más de 150 años de debate, nuevos análisis aportan evidencias sustanciales de que la primera pluma fósil encontrada en 1861 pertenece al Archaeopterys, un dinosaurio parecido a un pájaro.
Los científicos han estado tratando de averiguar, a lo largo de estos años, a quién pertenecía esta pluma del Jurásico tardío. Primero se sostuvo que pertenecía al 'Archaeopteryx lithographica', conocido por ser “el primer pájaro”, aunque en 2019 un equipo de investigadores sostuvo que el fósil no pertenecía a este dinosaurio,