Alguien debería haberle dicho al señor de la cara rara que en el rancio y casposo protocolo del saludo a los monarcas por la gracieta de Dios, los hombres permanecen erguidos y solamente agachan la cabeza, son las mujeres las que deben doblar las rodillas.
Cuando vi Idiocracia por primera vez me pareció muy acertada, ahora me parece muy comedida.
Llegados a este punto no se les puede definir mas que de esa manera o como partícipes interesados del expolio.
Se ve que para no fallar lo ha hecho todo.
Si alguien lo hace gratis, cojonudo.