Noticias de ciencia y lo que la rodea
13 meneos
50 clics

¡Hasta siempre Richard Lewontin!

Fue alumno de Theodosius Dobzhansky y, como su maestro, fue también un gran genetista aunque sus méritos no se circunscriben a esta disciplina; si el primero afirmó que “nada en biología tiene sentido si no es a la luz de la evolución”, el segundo tuvo a bien enseñarnos la importancia tanto de las humanidades como de las matemáticas si en verdad queremos hacer biología de la buena. De todo lo que cabría mencionar, yo quiero concentrarme en su papel como un gran intermediario entre las ciencias y la filosofía.

| etiquetas: richard lewontin , biología , evolución
11 2 0 K 23
11 2 0 K 23
Lewontin nos enseñó a sospechar de toda explicación así y gracias a él una buena parte de los biólogos se volvieron muy escépticos no sólo del adaptacionismo sino en general de las apuestas biologicistas que trivializan la complejidad de lo social.

Todos deberíamos tener en cuenta esto
El artículo es buenísimo, es un personaje que hay que conocer, pero el artículo tiene un error cuando asocia a Hegel con el materialismo dialéctico, que es propio de Marx, aunque más tarde lo aclara.

Tanto en uno como en otro caso la noción hegeliano-marxista de reificación parece haber jugado un papel importante. Entendiéndola como “el olvido histórico de un proceso de abstracción”, Lewontin movilizó a este concepto para hacernos ver que los organismos no pueden leerse como si

…   » ver todo el comentario
Acabo de entender por qué Gustavo Bueno decía que el utilitarismo kantiano es una vuelta de tuerca más al cristianismo

En ese sentido, su legado fue abrir la puerta a explicaciones que dejaron de lado la lectura funcionalista de los seres vivos en la cual estos últimos parecían una creación de aquel relojero ciego llamado selección natural que en su momento vino a desplazar a ese gran diseñador llamado Dios.

Joder, que cojonudoooooo

Edito
A este autor le debemos algunos de los más…   » ver todo el comentario
#3 El racismo es una consecuencia del binomio sociedad naturaleza. Lo civilizado como opuesto, superior, a lo salvaje.

No importa que se demuestre que no tiene una base biológica, el racismo pervive como supremacía cultural y moral de Occidente que impone instituciones y prácticas en contra de la bio/diversidad:

Monocultivo, monoteísmo, monogamia, monolingüismo, monarquía y lo monacal.

(El Hombre civilizado sí viene del mono, y la mona...)
comentarios cerrados

menéame