Lo que los investigadores han descubierto y publicado en un nuevo estudio en la revista Icarus es que ese metano es más reciente de lo que se pensaba (menos de 4.000 millones de años). Esa antigüedad apunta a que el metano de la superficie procede de procesos geotérmicos internos (géiseres o incluso vulcanismo de algún tipo), lo que viene a confirmar que tanto Makemake como Iris han tenido mecanismos geotérmicos generadores de calor como Plutón. Quizá los sigan teniendo.