@Ze7eN yo he pedido hoy para comer, porque he organizado un almuerzo virtual con todo el equipo, por tener un poco de momento de socializar y eso. He puesto un presupuesto y cada uno ha pedido algo para entregar a domicilio.
Ha sido la primera comida en 3 semanas que he comido que no haya cocinado yo mismo. Psicológicamente, nos ha ayudado a todos el momento de compartir chorradas y chascarrillos, como habríamos hecho en la mesa de la cantina. Esto nos ayuda a mantener la concentración (que es lo más difícil que estamos encontrando la mayoría al trabajar de continuo desde casa) y a mantener un poco la positividad.
La verdad es que la cantidad de sitios abiertos y ofreciendo comida a domicilio es menos del 10% de lo habitual, así que creo que cubre la parte esencial de un servicio que en general no lo es, para todos aquellos que no puedan cocinar por una situación individual, o simplemente quiera darse un capricho para llevar un poco mejor la cuarentena.
@flekyboy "Esto nos ayuda a mantener la concentración (que es lo más difícil que estamos encontrando la mayoría al trabajar de continuo desde casa)"
Totalmente cierto. Y lo peor es que yo ya llevaba trabajando desde casa de forma intermitente varios meses. Pero una cosa es no querer salir y otra no poder salir. El efecto psicológico me está afectando más de lo esperado. Llevo un tiempo en que no hago apenas nada en todo el día, sólo se pasan las horas sin que me de cuenta.
Ha sido la primera comida en 3 semanas que he comido que no haya cocinado yo mismo. Psicológicamente, nos ha ayudado a todos el momento de compartir chorradas y chascarrillos, como habríamos hecho en la mesa de la cantina. Esto nos ayuda a mantener la concentración (que es lo más difícil que estamos encontrando la mayoría al trabajar de continuo desde casa) y a mantener un poco la positividad.
La verdad es que la cantidad de sitios abiertos y ofreciendo comida a domicilio es menos del 10% de lo habitual, así que creo que cubre la parte esencial de un servicio que en general no lo es, para todos aquellos que no puedan cocinar por una situación individual, o simplemente quiera darse un capricho para llevar un poco mejor la cuarentena.