#17 Y luego llega la pandemia, y se les tiene que atender desde la pública.
Y luego hayque regular todo el sistema de vacunaciones y eso lo hace la sanidad del estado y ellos se aprovechan gratis.
No, si alguien tiene sanidad privada, debe también contribuir a la pública en justicia.
#50 Que yo sepa el "in dubio pro reo" se aplica durante el juicio, no después como pareces creer tú.
Quizá te refieres a otra cosa, como la irretroactividad de las disposiciones sancionadoras no favorables.
#3#4 En mi aldea los botes de pintura son macetas y los somieres puertas de acceso a fincas y cerrados. Si hasta hace poco la antigua furgoneta era donde descansaban las gallinas!!
#126 No sé que es lo que te descalifica más, si tu servilismo a los ricos, tu total falta de educación a la hora de dirigirte a los demás y a gente que no conoces o el hecho de que seas alguien con tan poca capacidad de reflexión que no se da cuenta de que estaría de acuerdo con discriminar a la gente si eso trajera pingues beneficios económicos.
Según tu razonamiento, el racismo, el clasismo o cualquier otro tipo de discriminación es bienvenido siempre que beneficie económicamente al estado.
Después te preguntarás que por qué vivimos en una sociedad tan deshumanizada.
#6 Voy a tomar el ejemplo de #11 para que tú y alguno que otro más lo entiendas.
Prohíbo hacerse fotos en mi local. Después levanto la prohibición a casi todo el mundo menos a las personas de piel negra.
¿Entiendes ahora el problema?
Está claro que es una norma muy clasista que favorece la discriminación, pagada con el dinero de nuestros impuestos. Y a la gente a la que le gusta el arte, no necesita de famosetes que les asesoren. Lo que le faltaba al Reina Sofía o a cualquier buen museo es llenarse de idiotas fans de la celebridad para que arranquen un trozo de moqueta o de papel de pared o que hagan cualquier otra estupidez porque fue en el lugar donde estuvo Fulanito, Zutanita o Menganite que son muy famosos.
#10#6
No comparto la mentalidad del "un servidor, un esclavo", de monarquía bananera. Me recuerda cuando abrieron El Prado para el impresentable de Woody Allen.
Me quedo con el ejemplo de un chef famoso, que durante el festival de cine de San Sebastián/Donostia, se encontró con que un actor extranjero famoso quiso ir a comer. El chef en cuestión dijo, está cerrado. Alguien le dijo, pero es que es fulanito. Y el hombre dijo, he dicho que está cerrado.
Y el famoso no pudo entrar.