En el vídeo, la joven aseguraba que detestaba la hipervigilancia de su lugar de trabajo, que haya un grupo de Whatsapp de los empleados, que algunos clientes liguen con ella, que se quejen de los precios o de que protesten por no ser atendidos en la mesa. Tras un par de días, el vídeo se viralizó acumulando miles de reproducciones. Sin embargo, sus quejas también han llegado a sus jefes de la cafetería que no han dudado en despedirla tras la difusión de las imágenes.
|
etiquetas: camarera , despido , cafetería , redes sociales
www.mites.gob.es/itss/web/atencion_al_ciudadano/como_denunciar_itss.ht
Un trabajo es un trabajo no tu vida, puedes pasarlo mal un tiempo hasta que salga otra cosa si te echan y ya, y más los jóvenes que las empresas reciben ayudas por su contratación
Pero lo que nunca te vas a quitar, es el recuerdo de cuando le regalaste tu puta vida a un negrero por 700 euros
www.meneame.net/story/no-he-visto-ni-uno-toda-vida-peticion-directa-so
Además, seguro que el inspector, si es que va a ir alguna vez, avisa a la cafetería del día de la inspección. Están todos compinchados.
Edito, me confundí con dmr.
#7
Pensamos que hijoputa la empresa que la despide, pero la gente es más hijaputa todavía, y este tipo de exposiciones deja la puerta abierta al troleo y las empresas hacen de padefo y despiden para ahorrarse movidas.
Después de eso; si tienes quejas en inspección de trabajo, no en un vídeo diciendo infinitas veces “mi trabajo me da igual”, que luego te despiden con razón y con un dossier tipo páginas amarillas de las burradas que dice. Si te sientes explotado te largas, muy necesitada no se le ve si le da igual, como repite innumerables veces, no será yo quien sienta más pena que ella misma, que no soy su madre.
A gozarla.
Me da que si se encuentra con ella misma siendo ella cliente, se quejaría de si misma por lo mal que trabaja.
Por cierto que mala suerte ha tenido que ha la han echado del curro, solo por decir en tiktok que hacía descuentos por la cara y que le chupaba un huevo que le pagarán de menos los productos que vendía si se equivocaba.