La resolución, que es provisional hasta que se celebre el juicio sobre el régimen de visitas, incluye una segunda cuestión polémica: dado que los puntos de encuentro familiar no abren los fines de semana, y teniendo en cuenta que la jueza ha ordenado que la visita al padre se produzca en sábado, el menor deberá ser entregado a su abuelo paterno en la comisaría de Policía Local de Paterna (Valencia), donde reside el hombre. Desde allí, tendrá 10 horas para conducir hasta Teruel, en total 170 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta.
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