Fue declarada culpable de tentativa de asesinato, tortura de menores y secuestro. Una amiga suya, supuesta cómplice, fue condenada a 14 años de cárcel por haber incitado con mensajes de chat y llamadas telefónicas el "recurso continuo a la violencia" contra el niño. El peritaje psiquiátrico demostraba "trastornos psíquicos graves y duraderos", sin que se aboliera la "capacidad de discernimiento". El niño, fue "completamente destruido". El menor salvado in extremis, fue hallado con hipotermia y en coma, y pesando solo 40 kilos con 12 años.
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