La colaboración entre la DEA (agencia antidroga norteamericana) y agentes especiales de la Udyco y Greco de Galicia permitió desarticular buena parte de una organización internacional dedicada al tráfico de drogas, incautar más de cuatro toneladas de cocaína y proceder a la detención de doce presuntos narcos: los seis tripulantes en alta mar, tres sujetos sudamericanos responsables de la banda en Madrid y dos gallegos.
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