Investigadores Israelíes de la Universidad Tel Aviv han probado con éxito en pacientes reales un nuevo láser destinado al tratamiento de heridas que serviría como reemplazo a las suturas tradicionales. Este sistema requiere de un sumo cuidado en la potencia y temperatura del rayo láser, pero beneficia a los pacientes con curaciones más rápidas, con menos complicaciones y que desarrollan menos y más leves cicatrices. Rel.:
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