No podía ni imaginarme que la pizza que había pedido iba a tardar casi 2 horas. Oí mucho ruido en la avenida mientras volcaba fotos y videos, al asomarme encontré un espectáculo humillante. Un chico de apenas 18 años, o quizás, menos, era atracado por un vehículo blanco y dos chicos en una moto para robarle las dos pizzas que me traía y el cambio de 50€. La seguridad ciudadana es un reclamo de nuestra sociedad. Y tod@s debemos colaborar para que las fuerzas del orden hagan su trabajo.
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