El jugador azulgrana se puso a hacer malabares con la pelota y, entonces, el comentarista dijo que podría “terminar en un semáforo” si no le iba bien en el fútbol, en referencia a los funambulistas que realizan arte callejero en los cruces de caminos. En redes sociales se entendió como racismo. Son las consecuencias de la cultura de la cancelación, que se resume en que si alguien comete un grave error ya no hay segundas oportunidades. Rápida y drásticamente se pide el despido y la anulación de la visibilidad de esa persona. Sin matices
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Y el FCBarcelona se ofende y no responde a los periodistas de Movistar. Y luego despidos.
Es cojonante
Vaya nivel
Luego te he leído y es entonces cuando he asociado con el tema del racismo. Pero te juro que lo que he visto al abrir el tweet es un mono relajado en la hamaca, que solo he asociado con estar relajado de vacaciones no he pensado ninguna asociación racista hasta que lo has comentado.
Luego al día siguiente busqué lo que había dicho porque pensé que sería una burrada, pero no.
Un elogio malinterpretado por racismo.
Que además, tampoco es fácil relacionar un semáforo con la raza de una persona, al menos desde mi experiencia.
Que asco de pijiprogres wokes ofendiditos de mierda, poniendo en evidencia su estupidez cada vez que escriben en Twitter
Habrá que ir ha contra quien ha tomado la decisión y preguntarle los motivos, digo yo...